El arte degenerado que inspiró una historia interminable

Edgar Ende, nació en Alemania en 1901, concretamente el día 23 de febrero. Fue un pintor surrealista que alcanzó mucha fama durante la década de los 30´s, hasta que el régimen nazi, calificó su trabajo como “arte degenerado”, confiscando en muchos casos sus obras, y destruyéndolas en otros casos. Padre de Michael Ende, creador de La historia interminable, influyó en su hijo notablemente como veremos a continuación.

 

Qué era el arte degenerado?

Una expresión utilizada por los nazis, para hacer referencia al arte moderno, que se alejaba del que ellos consideraban el arte heróico. Goebbles organizó una exposición en Múnich en el año 37, con más de 700 obras que consideraban que socavaban los valores deseables del nuevo régimen. La muestra fue una herramienta de propaganda política, y en ella se encontraban obras de Chagall, Kandinsky, Schiele, Franz Marc, Emile Nolde…

 

El surrealismo en “La historia interminable”

Indudablemente lo que uno vive, la época que le toca vivir, las lecturas y experiencias van conformando nuestro carácter, y en el caso de Michael Ende, la influencia del surrealismo de su padre es prácticamente indiscutible. Sus figuras humanas rígidas, y los mundos oníricos y poéticos que componen la obra de Edgar, están presentes en el trabajo de Michael. Al igual que el padre, el hijo crea mundos en los que lo real y lo imaginario se entremezclan, compartiendo ambos la idea del poder terapéutico del arte.

Ambos tuvieron una relación compleja de admiración mutua, que no impidió que estuvieran alejados durante algún tiempo. En el libro de cuentos “El espejo en el espejo”, Michael se inspira directamente en las pinturas surrealistas de Edgar.

Esta frase de Michael lo resumen a la perfección: “mi padre ha influido mucho en mi vida artística, no solamente porque su obra pictórica ha dado forma a mi creatividad literaria, sino también porque la ha liberado de la condicionante basura realista”

 

La tejedora cósmica

Desde mi punto de vista es una de las obras más interesantes de Ende. Se trata de un óleo sobre lienzo pintado en 1948. La fecha es importante ya  fue creada en un período post-guerra, cuando Edgar Ende retomó su trabajo artístico después de que los nazis hubieran prohibido y destruido gran parte de su obra anterior por considerarla “arte degenerado”. Admiro su capacidad de reponerse a este hecho, convirtiendo la pintura en un acto de resistencia artística.

En un momento actual internacional tan convulso, en el que el ascenso de la extrema derecha es un hecho, quizá más que nunca debemos mirar al pasado reciente y reflexionar. En lo que a mí respecta, haré como Edgar, y seguiré pintando, porque como decía mi admirada Louise Bourgeois:

«El arte es una garantía de cordura.»

En el siguiente vídeo, os cuento más sobre “La tejedora cósmica”, sobre Edgar Ende, y os ofrezco mi reinterpretación de esta preciosa obra, que actualmente se encuentra en una colección particular, así que no es posible disfrutar de ella.

 

 

 

Scroll al inicio